Dios tiene un plan hermoso para todos sus niños, pero este a menudo requiere que la Iglesia trabaje en alianza con personas solidarias como usted para poner en marcha su plan de restauración. Esto es particularmente cierto para el billón de niños vulnerables alrededor del mundo que son multidimensionalmente pobres, que carecen de acceso a las necesidades básicas tales como educación, alimentos, agua potable y un lugar seguro para vivir.
En 2022, los católicos generosos de los Estados Unidos como usted se ofrecieron para ayudar a los niños más pobres del mundo, al brindar a nuestros socios ministeriales en 12 países la ayuda que necesitaban para transformar vidas.
Su generosidad ayudó a Cross Catholic Outreach a otorgar subvenciones para 24 proyectos, ayudando así a los niños en África, Asia, el Caribe, América del Sur y en México y Centro América. Por ejemplo, su apoyo bendijo a jóvenes sobrevivientes de violencia y tráfico de personas en (las) Filipinas con un hogar seguro y centrado en Cristo. Usted también bendijo a 37 niñas y niños en la guardería infantil Impaputo en Mozambique al ofrecerles comidas sanas y apoyar su educación católica.